Un estudiante guaraní le escribió una carta a su profesor del colegio secundario para explicarle que no entiende bien el idioma y que, por eso, le resulta muy difícil desempeñarse de manera correcta en la escuela.

"Perdón profesor por no competar es que no entiendo nada y tengo mucha vergüenza para hablar porq no se ablar mucho en castellano solo en guaraní te pido una disculpa profe perdón. Espero que me entienda profe porque es muy difisil empezar de 0 en otro pais", dice textual la carta que envió el alumno al profesor Manuel Beccerra.

El profesor contó que el taller de acompañamiento funciona como resultado de que el colegio recibe a muchos chicos migrantes que aprendieron a hablar en guaraní o quechua y que su lengua materna no es el castellano sino una lengua originaria americana. "Los pibes que tienen problemas de lectura y escritura los tienen por causas diferentes: cuando detectamos esto, empezamos a pensar que una experiencia posible era la enseñanza del castellano como segunda lengua", contó.

Por otro lado, Becerra destacó que, como país, no estamos formados para esto, ya que "ni el Estado financia este tipo de actividades, aunque llegamos a una justificación pedagógica dando más forma a lo que surgió de manera intuitiva, y logramos que nos paguen un par de horas más por semana para armar estos espacios de acompañamiento".