El hecho ocurrió en Saint Louis (Estados Unidos), donde Adam Smith se mudó con su madre cuando a la mujer le diagnosticaron cáncer de pulmón: ella necesitaba cuidados en el proceso de su enfermedad.

Finalmente, la madre de Smith falleció el 21 de julio pasado y él decidió hacer la limpieza del departamento que la mujer ocupó por dos décadas.

Entonces fue que tuvo la oportunidad de abrir el paquete que, desde que tuviera memoria, estaba en el congelador de la vivienda. Un paquete por el que siempre había preguntado y sobre cuyo contenido siempre recibía evasivas.

Ya con su madre muerta, Adam lo abrió y descubrió algo aterrador: "Resulta que era un bebé", dijo relató al portal KSDK; más precisamente, el cadáver de un bebé que "todavía tenía piel, cabello y todo, estaba momificado. Después de eso, me asusté, lo puse en la caja y llamé a la policía de inmediato", agregó.

La identidad de ese bebé momificado le resultó sorprendente: se trataría de una hermana de Adam que habría nacido muerta 40 años antes del aterrador descubrimiento. "¿Quién tiene absolutamente a su propio hijo en una caja durante tanto tiempo? Solo tengo muchos pensamientos. Es una locura ", dijo al citado portal local.