Sucedió en el barrio de Colegiales, cuando un estudiante secundario de 14 años denunció este jueves ante las autoridades de la Comisaría Vecinal 13 C, que dos hombres quisieron subirlo a una camioneta cuando llegaba a su colegio.

El hecho fue denunciado por la madre del adolescente y por la directora del colegio privado Hans Christian Andersen, ubicado en la calle Ciudad de la Paz al 1200.

Tal consta en la denuncia del adolescente, el hecho ocurrió al mediodía de ayer, cuando el chico de 14 años caminaba por el cruce de Ciudad de la Paz y Virrey Loreto rumbo al ingreso del colegio y una camioneta blanca ocupada por dos hombres se paró a mitad de cuadra, en la vía pública.

Voceros policiales indicaron que siempre según los dichos del estudiante, uno de esos hombres bajó del vehículo y le dijo: “Subí que te llevamos”.

El adolescente se asustó, retrocedió unos pasos y, debido al paso de otros transeúntes, el hombre de la camioneta regresó al rodado, que huyó por Virrey Loreto en sentido a la calle Amenábar. El denunciante dijo que la camioneta, además, tenía el logo de una cadena de supermercados.

La causa, caratulada en principio como “averiguación de ilícito”, quedó a cargo del fiscal en lo Criminal y Correccional Número 27, Marcelo Munilla Lacasa, quien ordenó tomar una serie de declaraciones y a los detectives de la Brigada de la comisaría 13 C de la Policía de la Ciudad, efectuar un relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona.
 

La confirmación del colegio


El Colegio Andersen difundió a la comunidad educativa un comunicado en el que confirma el hecho y da una serie de consejos.

“Como muchos de ustedes ya estarán al tanto, en el día de hoy, un alumno de nuestra institución, pasó una mala experiencia en el horario de entrada al colegio al medio día. Fue realizada la denuncia ante las autoridades pertinentes”, dice el texto.

Además, señaló que “en los últimos días ha habido algunos robos en la zona” y pidió a los padres hablar con sus hijos sobre las siguientes recomendaciones: “Estén atentos al entorno; no hablar ni detenerse ante el pedido de extraños; en la medida de lo posible tratar de estar acompañados; ante cualquier situación extraña; utilizar los negocios de la zona e informar lo que les sucede”.

También aconsejan “acercarse a algún padre del colegio que vaya con sus hijos; transitar por las calles más concurridas, aunque sea el camino más largo; entrar al colegio por cualquiera de los accesos”. Y concluyeron: “Hemos pedido más vigilancia a la policía para los horarios de entrada y salida”.