En 2018, la entonces ministra de Seguridad Patricia Bullrich adquiría en el exterior un camión antimotines para la Policia de Seguridad Aeroportuaria (PSA), destinado específicamente a la eventual represión de manifestaciones populares.

En lo que representa un giro simbólico y concreto de 180 grados en las políticas nacionales, la actual ministra Sabina Frederic decidió reconfigurar el destino del vehículo para que ya no lance gases lacrimógenos ni agua coloreada sino líquido sanitizante.

En efecto, sus tanques para 3.000 litros agua y la capacidad de almacenamiento con 50 litros de tinta y 50 litros de gas lacrimógeno, ahora son llenados con hipoclorito de sodio para santizar barrios populares de la Ciudad y del conurbano.