En la ciudad de Posadas, vecinos denunciaron que había una fiesta, con música en alto volumen, en un boliche, por lo que se tuvo que presentar la Policía y llevar a cabo la clausura correspondiente por violar el aislamiento social, preventivo y obligatorio.

En el lugar se registró una situación insólita que fue relatada de forma desopilante por Mauro Szeta. “No había festichola, estaba jugando al truco y tenía 31 para ganar el envido”, fue el textual del dueño del boliche, según el periodista, que como parte de la representación, interpretó los supuestos temas bailables que se escuchaban en el lugar.