Azcona, detenido en el penal de Ezeiza, se negó a ampliar su declaración indagatoria ante el juez Luis Zelaya. Su abogado argumentó que el sospechoso de haber asesinado a la estudiante chilena "no se ubica en tiempo y espacio".

"Se negó a declarar porque tiene un trastorno mental importante. No se ubica en tiempo y espacio", indicó el abogado defensor Jorge Borgo, agregando que el joven, que recibe tratamiento psicológico en la cárcel, está "angustiado" por la situación.

No obstante, los estudios psiquiátricos que se le hicieron al sospechoso determinaron que es imputable y que podrá ser sometido a un juicio por el asesinato, además de advertir que el joven es "misógino y presenta rasgos psicopáticos".

Al acusado le realizaron varios tests, entre ellos el de Bender, para determinar si tiene algún trastorno neurológico o emocional, y el de Rorschach, que se usa principalmente para evaluar la personalidad y quedó determinado que comprendió la criminalidad de sus actos.

La estrategia de la defensa, al parecer, va en sentido de demostrar lo contrario.