Los pasajeros de los 12 vuelos semanales que llegan desde Roma serán entrevistados y se les tomará la temperatura para evitar la propagación del virus.

“Estamos activando el código internacional. Estuvimos toda la mañana conversando con Europa y vamos a cambiar el protocolo. Como Italia tiene doce vuelos directos que llegan a Ezeiza vamos a aplicar un protocolo distinto”, aseguró el ministro de Salud, Ginés González García. 

Los vuelos que lleguen desde Italia aterrizarán en una plataforma distinta y tendrán un control especial para detectar posibles síntomas compatibles con la enfermedad y los pasajeros tendrán que firmar una declaración jurada. 

"La idea de que sean las propias personas quienes digan si tienen síntomas es fundamental”, aseguró el Ministro, que recalcó que “Italia hizo una inversión extraordinaria, dos millones de personas pasaron por los sensores de temperatura, pero el sensor es inespecífico. Realmente no hay nada mejor que la autorreferencia. Con los vuelos de Italia vamos a hacer una indagación personal”.