En enero de este año un tribunal de Suiza condenó a un hombre a un año de prisión en suspenso por "violación" cuando se comprobó que durante el acto sexual con una mujer, que conoció por Tinder, se sacó el preservativo sin el consentimiento de ella. 

La Justicia determinó que si la mujer hubiera sabido que él iba a sacarse el preservativo, se habría negado a tener relaciones sexuales por lo tanto el hombre realizó "Stealthing" o "stealth sex", una nueva palabra para hablar de una forma de violación. 

La violación se da en el marco de una relación donde no están consentidas las condiciones, en este caso que el hombre se saque la protección. 

Incluso Alexandra Brodsky, investigadora de la Universidad de Yale, que trabaja en el tema señaló que existen foros online en los que se ofrecen "tips, trucos y técnicas" para asegurarse de "vaciar toda la carga [semen] y que ellas no sospechen" o de la violencia psicológica para que la mujer sienta que también fue responsabilidad "que ella no se pudo no haber dado cuenta que él ya no tenía preservativo". 

"No me gusta la palabra 'stealthing'. Suena como algo difícil y desagradable, pero algo así como una moda", dijo Brodsky y aclaró: "Al llamarlo quitar el condón de forma no consensuada, dejamos claro qué daño es".

Esta nefasta práctica también apunta a las mujeres que aseguran "estar cuidándose con pastillas" y en realidad buscan embarazos no consensuados.