El actor que intervino en un episodio de ataque a un ladrón, para que un grupo de personas no lo lastimara, fue consultado por Desayuno Americano, sobre la mentirosa afirmación de que la marihuana es puerta de entrada hacia otras drogas.

"El umbral para cualquier droga son las circunstancias emocionales y afectivas", explicó para los panelistas que sostenían una idea que heredó la sociedad de la época más violenta de la historia argentina.

"Creo que la maquinaria penal, policial y judicial no debería dedicar sus energías y el dinero de los impuestos de los ciudadanos a perseguir chicos que se fuman un porro", agregó el actor.

"Hay algo que está como el culo. Hay que poner juicios por jurado, procedimiento oral. Las causas tiene que durar poco. Hay que liberar a la justicia de la carga que significa esta boludez de perseguir a los pendejos con el porro recreacional", disparó con indignación.