La Asociación Bancaria anunció para miércoles y jueves la prosecución del plan de lucha por la reapertura de las negociaciones paritarias, que consistirá en asambleas y retención de tareas durante las últimas dos horas de atención al público, en bancos de todos el país.

El gremio, como sabía, había acordado con los bancos en marzo pasado que, si la inflación superaba el 33 por ciento, las negociaciones serían reabriertas, algo que ahora las patronales rechazan.

Entre los reclamos también figuran el cese de los despidos en el gremio, la eliminación del impuesto a las Ganancias, la defensa del trabajo y la producción nacional y la defensa de la banca pública, según informó el sindicato que encabeza Sergio Palazzo.

La Bancaria plantea su "solidaridad con todos los trabajadores con o sin empleo registrado" y rechaza "la recesión, la apertura de las importaciones, el libremercadismo comercial digital" porque "afectan a empresas argentinas y su quebranto comprometerá al sistema bancario una vez más, como ya sucediera en la aciaga década del 90".