Un cura con Facebook suena extraño pero no está mal. Las nuevas maneras de comunicarse parecen haber llegado a la Iglesia. El problema ocurre cuando las opiniones respecto a temas delicados y sensibles no son lo que uno espera de un representante de la institución que supone promover paz y la justicia divina. Gran parte de la Iglesia fue aliada y colaboró con militares del último proceso militar, pero esa época ya pasó o, por lo menos, debería.

El cura Jorge Hidalgo, de la ciudad de Santa Rosa, La Pampa, a través de la página de Facebook "Rafael Videla Forever", le dejó un mensaje al dictador en el día de su cumpleaños: "No fueron 30 mil ni fueron inocentes. Feliz cumpleaños General! Un soldado nunca pide perdón por haber salvado a su patria de una dictadura comunista". Así se desató la polémica que terminó estallando en una manifestación muy particular.

Luego de que se difundiera lo que había pasado en la Web, el cura dio una misa en la capilla Medalla Milagrosa, del barrio de Butaló, en la capital pampeada que resultó un tanto incómoda y sorpresiva. Un grupo de 40 manifestantes ingresó a la iglesia con bigotes pintados, simulando ser Adolf Hitler, y escrachó sus paredes con fotos de personas desaparecidas en la última dictadura.

Si bien la misa se realizó sin incidentes, Hidalgo la pasó bastante mal cuando algunos manifestantes se acercaron a comulgar y pronunciaron nombres de desaparecidos.

En una misiva que hizo llegar a todas las instituciones cristianas, el obispo dioclesiano monseñor Mario Aurelio Poli repudió el hecho y aseguró que “el cura causó un profundo pesar y un grave daño a la iglesia”, además Hidalgo fue denunciado por la Secretaría de Derechos humanos de La Pampa por “apología al delito”.