La ciudad entrerriana de Colón regresa a la fase 1 de la cuarentena luego de una disparada de 18 casos confirmados de COVID-19 que se originaron a partir de un grupo de irresponsables que organizó una “mateada” en un gimnasio.

El intendente de la localidad entrerriana, José Luis Walser, confirmó que el brote se debido a “un grupo reducido” que compartió la bebida. Además de los contagios, hay 120 personas en aislamiento estricto que aguardan los resultados del test.

Según relató el intendente, todo se inició por una persona que viajaba a Buenos Aires, con autorización, para un tratamiento médico, y regresó infectada. "El contagio se dio entre los vínculos estrechos, en las reuniones que están autorizadas", explicó.

Walser también detalló que inició un procedimiento ante el juez federal de Concepción del Uruguay, Pablo Seró, por el incumplimiento al aislamiento que generó el pico de casos.

"La gente está muy enojada con lo que pasó, se había recuperado actividad y estábamos en una fase de flexibilización casi absoluta", dijo el mandatario.