Pablo Ladaga se sintió dolido como católico por el paupérrimo posteo de Javier Milei por la elección del nuevo Sumo Pontífice.

Teniendo en cuenta que el 70% de los argentinos profesa la religión católica, que su máximo representante haga una burla de la fe es, por lo menos, cuestionable.

La actitud del mandatario nos interpela como sociedad o al menos debería hacerlo.