Mientras las carteras del Gobierno macrista recortan gastos, eliminan subsidios y le quitan impuestos a la exportación, la obra social de jubilados y pensionados -PAMI- recorta la distribución de medicamentos a los más necesitados adjudicando falta de recursos, aunque paradójicamente suma empleados de alto rango. 

En los últimos días, se supo que el equipo de comunicaciones del PAMI sumó al menos siete personas con sueldos de 80 mil pesos desde 2015. Mientras que, tal y como muestra el informe televisado por C5N, en el organigrama total había 38 funcionarios políticos, pero en la actualidad son alrededor de 300: 38 miembros de la 'grasa militante' que fueron reemplazados por 299 'personas bien' de Cambiemos.

En el caso del nombramiento de Daniel Alejo Paredes, exministro de Seguridad de Córdoba vinculado a causas que condenaron a distintos jefes policiales por corrupción con miembros del narcotráfico. Experto en inteligencia y escuchas, Paredes fue contratado por el área de Recursos Humanos del PAMI, con objetivos más que sospechosos.