No los dejan ir al baño y toman de rehenes a jefes
En Shanghai, China, ante las nuevas medidas para aumentar la producción, los empleados se quejaron por las condiciones de trabajo e hicieron una dura huelga en la cual encerraron a sus propios jefes.
Las condiciones laborales eran pésimas. En toda una jornada de trabajo, por citar un ejemplo, solo podían ir al baño dos minutos. Estas medidas se llevaron a cabo en una fábrica de productos electrónicos con el objetivo de aumentar la producción.
Pero la respuesta no tardó en esperar. Cientos de trabajadores durante más de 36 horas mantuvieron de rehenes a los administradores de Shanghai Shinmei Electric Company, quienes posteriormente fueron liberados ilesos.