Miles de manifestantse realizan un abrazo simbólico al edificio donde funcionaba el ministerio de Salud, en los últimos días rebajado a la categoría de secretaría y englobado bajo la órbita del ministerio de Desarrollo Social, encabezado por Carolina Stanley.

La fuerte política que ordenó el Gobierno para ajustar y revertir el déficit fiscal a pedido del FMI busca reducir el presupuesto 2019 -hasta ahora las cifras previstas para 2018 fueron subejecutadas- y la reacción de los trabajadores y de las dependencias provinciales no fue la de acompañar la decisión.

Los manifestantes reclaman que revierta el cambio en el organismo liderado por Adolfo Rubinstein, y lo hacen saber con una multitudinaria movilización desde la estación de Constitución por la avenida 9 de Julio, encabezada por la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA), que nuclea a 30 mil médicos, profesionales y trabajadores del sector en 600 hospitales públicos de todo el país, según informó tn.com.ar

Lo cierto es que la medida se veía venir, ya que cuando restan menos de cuatro meses para fin de año aún no se ejecutó ni la mitad de los $56.485 millones de pesos presupuestados para 2018: los programas con menor vivel de ejecución son el de Cobertura Universal de Salud (14, 66%), que debe garantizar los medicamentos para los centros de primer nivel de atención; el de Lucha contra el SIDA y  Enfermedades de Transmisión Sexual e Infecto Contagiosas ( 35,92%), cuyo titular el mismo lunes presentó su renuncia; el de Desarrollo de la Salud Sexual y la Procreación Responsable ( 31,72%), que el presidente Macri dijo que aumentaría tras el rechazo a la ley de Aborto legal, seguro y gratuito; y el de Atención Sanitaria en el Territorio (37,06%), que garantiza el acceso a la salud para población vulnerable, de acuerdo a la información publicada por Tiempo Argentino.

“Este es un símbolo de lo poco que le interesa la salud al gobierno. Ya había desjerarquizado al Ministerio en lo presupuestario y en las acciones. Suspendieron el programa Remediar. Hubo faltantes de medicamentos y de reactivos. Hoy renunció el director del área que maneja VIH y enfermedades de transmisión sexual. Están suspendiendo vacunas obligatorias. Entonces lo que hacen es un maquillaje donde devalúan la idea de lo que significa la salud. Lo que viene va a ser peor”, describió Ginés Gonzalez García, exministro de Salud entre 2002 y 2007.

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