La convocatoria de empleo para cubrir diez puestos de personal de limpieza fue respondida por una multitud: según estimaciones, fueron miles de personas las que formaron cuatro cuadras de cola ante la empresa.

Eso no fue todo: cuando abrieron las puertas del lugar donde tomaban los datos, los postulantes se abalanzaron atropellándose, como en los peores tiempos de la desocupación argentina… producto de la desesperación.