Una calesita fue prendida fuego intencionalmente en Valentin Alsina. "La verdad que fue una gran tristeza ver el trabajo y el esfuerzo de tantos años, que haya quedado un polvo. Se desintegró todo: los juegos mecánicos son de fibra de vidrio y eso arde rápidamente. Fue un shock grande", relató la mujer a C5N.

María lleva 31 años dedicada a hacer funcionar la calesita "Manolo" en la plaza Constitución de Valentín Alsina, en el partido de Lanús, provincia de Buenos Aires. María y su marido, Manolo, adquirieron la calesita en 1988.

"La calesita la armamos juntos. Desde los 20 años que estamos con esto de las calesitas. Estuvimos en otros lugares y nos quedamos en Valentín Alsina. Somos de Lanús, él fue quien la armó realmente, la estructura. Ahora estamos con mis hijos", contó la mujer sobre el trabajo que empezó con su esposo.

María explico a los medios de comunicación que su familia no tiene un seguro para que se haga cargo al menos de una parte de la reconstrucción solo cuentan "con la voluntad de la gente y la fuerza para trabajar" para reconstruir el lugar.

"La estructura está entera pero hay que reconstruir todo. No sacamos la cuenta de cuánto costará volver a comprarlos, todo lo fuimos armando de a poco. La gente, que es muy solidaria en el barrio, nos va a ayudar a hacer un festival para poder empezar aunque sea a pintar y hacer el techito, pero es una pena porque fueron muchos años de mi vida, de trabajo de mi esposo, de mis hijos", expresó.

"A mi hijo lo llamó un amigo, él me avisó y cuando vinimos el fuego ya había consumido prácticamente todo, ya lo estaban terminando de apagar. Fue a las 5 de la mañana que empezó todo, aparentemente tiraron en un juego unas bolsas intencionalmente, y yo pienso que los jóvenes que hicieron esto no pensaron en el daño que estaban haciendo", convino María.

"El Municipio se está juntando con la gente del barrio para ayudarme a recuperar las cosas más que nada para poder empezar a funcionar nuevamente. Tuve suerte de que los bomberos actuaron rápido. Si no apagaban en seguida el fuego la calesita se consumía porque es toda de madera, fibra y laca, que hace combustión", describió.

María insistió con que el ataque fue al azar, "nada premeditado", sino que los que lo perpetraron "pensaron 'vamos a molestar un poco con algo'" y se la agarraron con la calesita.