Un informe anual sobre antisemitismo de 2016 sostuvo que los mensajes y amenazas nazis fueron aumentando y que continúan con esa tendencia. El informe de este año de la DAIA se dará a conocer esta semana.

El trabajo, elaborado en base a denuncias en todo el país, advierte sobre "la vigencia que todavía tiene el discurso desplegado por el régimen nazi, su simbología y la violencia que genera su negación, banalización o emulación al ser utilizado para agredir a miembros de la comunidad judía".

Durante todo el año 2016 se registró en la DAIA un total de 351 denuncias por hechos antisemitas, lo que implicó un descenso frente a las 478 registradas durante 2015. No obstante, el informe señala que pese al descenso de denuncias, el año 2016 se caracterizó por una profundización de la violencia respecto de las características de los hechos declarados. Si bien disminuyeron en cantidad de denuncias respecto del período anterior, cualitativamente hubo episodios de violencia preocupantes como, por ejemplo, el hecho de que el entonces defensor del Pueblo de la localidad de Cerrillos en la provincia de Salta, Carlos Paz, insultara abiertamente a través de Facebook a la comunidad judía, situación agravada por su función y que finalmente le costó el cargo. También que en dos oportunidades, cuidadores de instituciones fueron golpeados, como asimismo situaciones de agresión antisemita en centros de salud hacia pacientes.

Por otro lado, se destaca como hecho llamativo que las denuncias de actos antisemitas estén encabezadas por elementos de simbología nazi en su mayoría (32%) frente a las expresiones xenófobas (26%) y expresiones sobre Medio Oriente (17%). Esto se vio reflejado por la DAIA ante las denuncias de aparición de objetos y simbologías nazis en los últimos tiempos en las redes sociales.

El canal mayormente usado para exponer los actos antisemitas en la Argentina es internet: más del 63% de los hechos denunciados durante el 2016 fueron manifestaciones expresadas por esa vía. Dentro de este ámbito prevalecieron las denuncias por hechos correspondientes a la categoría "espacio de participación en medios de comunicación" (46%); siguiéndole "Redes sociales" (18%) y, por último, "sitio web" (3%).

La investigación señala que la preponderancia de hechos discriminatorios en los foros públicos de los medios de comunicación advierte sobre la mutación que se está dando socialmente respecto a las modalidades de expresión de odio. "La democratización de la tecnología, la ausencia de legislación a nivel local y el anonimato posibilita que quienes presentan actitudes violentas encuentren en la red el terreno propicio para la manifestación de las mismas", dice el trabajo de la DAIA.

Además, de las denuncias recibidas por la DAIA durante 2016, se encuadran en al menos diez categorías de manifestaciones antisemitas como: expresiones xenófobas tradicionales; antisemitismo religioso/teológico; apelaciones a la avaricia o la explotación; antisemitismo nacionalista; dominación del mundo-Conspiración; simbología nazi; negacionismo-banalización; Medio Oriente; la negativa al derecho de la existencia del Estado de Israel y la homologación con la Shoá de las acciones políticas llevadas a cabo por el Estado de Israel en sus fronteras, entre otras.