Una pareja fue expulsada de un local de comidas rápidas, por darse un beso mientras se tomaban una selfie. Hasta acá, la información parece un sinsentido. Pero si puntualizamos que se trataba de una travesti y un hombre, la insensibilidad y la poca tolerancia ante la diversidad sexual saltan de inmediato como el motor de la discriminación.

Organizaciones LGTB (Lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) lanzaron una campaña para manifestarse en la puerta del negocio este viernes a las 19, con una besada general.

Fernanda y su novio fueron a comer al local ubicado en la zona comercial de Belgrano, más precisamente en la esquina de Cabildo y Juramento, en la noche del domingo.

En determinado momento, cuando se besaron para tomarse una selfie, la pareja fue interrumpida por el encargado quien les solicitó que se retiren del local porque había recibido una queja.

Ambos decidieron evitar el escándalo y se retiraron. Afuera, dos patrulleros convocados por la empresa le pusieron un tono demasiado preocupante a la actitud de la empresa.

"No fue una discusión violenta, no quisieron decir mucho porque las personas trans estamos acostumbradas a ser víctimas de esta clase de maltrato, a pasar vergüenza y que nos estigmaticen", afirmó la secretaria de juventud de la Federación LGTB, Julieta Calderón.

Calderón anunció que este viernes a las 19 se realizará una besada masiva en la puerta del local para “visibilizar el tema y concientizar a las empresas contra la discriminación”.

La pareja realizó la denuncia el lunes pasado ante la Defensoría LGTB, un organismo que depende de la Defensoría del pueblo de la Ciudad. Ahora, esperan una disculpa pública de Mostaza.