Una cafetería taiwanesa llamada ‘Let’s Café’ decidió implementar un sistema que permite a los clientes imprimir sus fotografías sobre la espuma de su propio café. Esta genial singularidad fue creada bajo el marco del día de San Valentín chino.

El funcionamiento es sencillo, aunque no lo parezca. Cuando alguien pide un café, puede enviar una imagen a través del celular, la que luego enviarán a una impresora. Pero tranquilos, la impresora tiene un polvo comestible de cuatro o cinco colores, incluido el color café, y así la impresión queda por sobre la espuma.

En sí, la elaboración de este café es un poco cara, pero no deja de ser un detalle, tal vez algo bizarro, para toda pareja que cumpla un aniversario o cualquier tipo de fecha especial, o alguien que busque conquistar a otra persona.

La pregunta ahora es, ¿se copiará esta idea en otras partes del mundo? ¿Cuándo llegará al país para que los enamorados argentinos puedan disfrutar de este novedoso método?