El gobierno de Irán tenía prohibido desde la revolución de 1979 que las mujeres asistan a los estadios de fútbol pero dicha ley se hizo a un lado para que pudieran ver el partido de su selección contra España.

Las autoridades habían dado el visto bueno para que las mujeres pudieran entrar al Estadio Azadi en Teherán, pero la policía en un principio se había negado a dejarlas pasar. Así que tuvieron que hacer una manifestación pacífica una hora antes del silbatazo inicial.

Luego de esa movida, las aficionadas pudieron ingresar y las redes se inundaron de fotos del hecho histórico.

Durante el 2006, las mujeres pudieron asistir a un encuentro eliminatorio contra Baréin, pero solo en la parte complementaria pese a las promesas de Mohammad Jatamí, pero éste abandonó el poder y ellas nunca pudieron acceder al estadio. 

Las mujeres iraníes pudieron por primera vez entrar a una cancha