El mexicano Juan Carlos “N”, conocido como “El monstruo de Ecatepec”, fue detenido por asesinar, abusar sexualmente y descuartizar a más de una decena de mujeres desde 2012 hasta la fecha. En un reciente video que se filtró en las redes sociales el hombre admite que seguiría matando mujeres en el caso de quedar en libertad.

Según detalla un documento oficial, el feminicida declaró que sometía a sus víctimas con un arma punzocortante con la que las degollaba, para después sostener relaciones sexuales con los cuerpos y luego procedía a descuartizarlas, colocando los órganos en frascos con formol.  

Además, algunas de las extremidades de sus víctimas las guardaba en un refrigerador y otras las servía de alimento para perros. Asimismo, la grasa corporal y la piel las colocaba en macetas como abono para plantas. En cuanto a los restos humanos que le sobraban, el hombre los metía dentro de bolsas de basura y los arrojaba en distintos contenedores de basura.

En declaraciones a la policía, Juan Carlos "N" dio a conocer que el odio hacia las mujeres fue provocado por su madre, quien lo vistió de mujer de niño y lo obligaba a observar cuando mantenía relaciones sexuales con diferentes parejas.

Pero el “monstruo de Ecatepec” no actuaba solo. Su esposa, identificada como Patricia “N”, iba a buscar a las víctimas y les hacía creer que vendía ropa. Luego de generar confianza e intercambiar números de teléfono las invitaba a la casa para que observaran las supuestas prendas que comerciaba y de ahí no salían más.

En un video grabado por las autoridades que más adelante se filtró en las redes sociales muestra parte de las declaraciones de Juan Carlos "N" quien, además de confesar todos sus crímentes, aseguró que seguiría asesinando mujeres en el caso de quedar en libertad.

Algunas de las frases más fuertes que dejó el interrogatorio:

“Mi patrón no puedo salir de esta, pero si salgo de una vez les digo a los patrones voy a seguir matando mujeres”

“Yo te pongo esta pinche mujer, dame su corazón y toda va a estar bien. Los oficiales encontraron corazones en mi habitación. Prefiero que mis perritos coman carne de esas mujeres a que ellas sigan respirando mi oxígeno”.

“Yo no fui feliz, nadie lo va a ser mientras yo siga aquí en la Tierra, todo el daño que yo pueda y divirtiéndome de ese daño. Porque a todos los familiares de la víctimas yo les hablaba bien. Me chingué a su hija y lo disfruté. Mientras yo esté aquí voy a seguir así”.

“Yo estoy bien, lo que hago está bien patrón, porque solo estoy limpiando al mundo de porquería, estoy totalmente sano”.

Testimonios de personas que interactuaron con Monstruo de Ecatepec