Tanto en Argentina, como también en Paraguay y Uruguay se desarrolla este ritual todos los 1 de agosto, que viene desde épocas ancestrales. 

¿Cómo se toma?

Se beben tres sorbos de caña con ruda para espantar los males del invierno (y los malos espíritus) y preparar el cuerpo para los ardores del verano. 

De esta manera, se atrae la salud, la buena fortuna y se alejan los maleficios. Pero, ¿dónde tiene su origen esta vieja tradición?

¿Para qué se toma?

Se trata de otra manera más de adorar a la Madre Tierra y Pachamama, por parte de los pueblos originarios que habitaron (algunos pocos todavía habitan) esta tierra. 

Pero, originalmente, la tradición milenaria tiene fuertes raíces en toda la zona del Litoral argentino: especialmente en las provincias de Misiones y Corrientes. 

Y el origen se remonta a los indios guaraníes, quienes tenían conocimientos de las propiedades medicinales y curativas de la planta ruda macho. 

Esta planta era utilizada para curar parásitos y malestares estomacales. Pero también calmaba el ardor y la picasón de la picadura de insectos. Por lo que era considerada una planta santa. 

El 1 de agosto en Argentina y varios países de América Latina se celebra el Día de la Pachamama, o de la «madre Tierra». Se trata de una fiesta de agradecimiento y que adquiere diferentes tipos de festejos dependiendo de la región. 

¿Cómo se prepara?

En primer lugar, como deben imaginarse, deben tener la planta de ruda macho. Ésta se deja macerar en caña durante al menos un mes (suele prepararse los primeros días de julio). 

La caña con ruda puede manternese guardada durante un año para volver a hacer el ritual al año siguiente. Para suavizar el sabor fuerte del alcohol hay quienes le agregan cáscaras de naranja o limón.