La justicia española, más precisamente un juez sevillano, resolvió una medida cautelar para restringirle a una familia la posibilidad de visitar a un pariente en el cementerio: el motivo es la existencia de un pedido de análisis genético para determinar la supuesta paternidad del difunto, de parte de la presunta hija hasta el momento no reconocida.

Según informó la agencia EFE, el reclamo apunta a evitar que los herederos actuales incineren el cuerpo ya enterrado y cercenar la posibilidad de realizar la comparación de ADN.

“Es la historia de siempre, la del poderoso y la mujer débil”, resumió el abogado denunciante, Fernando Osuna, al describir que se trata de un empresario de mucho dinero que mantuvo una relación con una empleada de supermercado.

De acuerdo a como avance el juicio, los actuales herederos podrían verse obligados a compensar a la hija extramatrimonial con la parte legítima del patrimonio familiar, unos dos millones de euros.

La denunciante reclamó la medida cautelar con el objetivo de que la otra parte se abstenga temporalmente "de llevar a cabo una conducta tendente al acercamiento al lugar donde está inhumado o enterrado su presunto progenitor, en aras a evitar la incineración del cadáver".

La justicia entendió que es necesario el fallo para evitar "una posible actuación en ese sentido por cualquier persona, mientras dure el proceso o, al menos, hasta tanto le sean extraídas al cadáver las correspondientes muestras orgánicas para llevar a cabo la prueba de ADN que esta parte tiene interesada, asegurando de esta forma la práctica de la misma".

Además, la denunciante ya presentó un principio de prueba tal y como exigen las normas, y el juzgado entendió que supone "un indicio favorable al fundamento de la pretensión".

La documentación presentada se refiere a la declaración por escrito, firmada por una persona que manifiesta conocer de forma directa los hechos, puntualmente el noviazgo entre el fallecido y la madre del demandante.

Entre las pruebas también existe la testifical de la madre de la denunciante, el testimonio de otra persona que trabajaba para la familia mientras se dio el nacimiento de esta presunta hija y además, fotografías en las que se aprecia el parecido físico.