La Corte Suprema de Justicia convalidó este martes lo decidido por el máximo tribunal de la provincia de Buenos Aires, que había a su vez ratificado la condena de 15 años de prisión aplicada al cura Julio César Grassi.

Grassi fue condenado por abuso a un menor al que debía cuidar y la Corte desestimó, por unanimidad, los recursos presentados por sus defensores.

De este modo quedó firme la sentencia dictada por el Tribunal en lo Criminal 1 de Morón, que condenó al cura como autor reiterado de los delitos de abuso sexual agravado por resultar sacerdote, encargado de la educación y guarda del menor-víctima en concurso real entre sí, que a su vez concurren idealmente con corrupción de menores agravada por su condición de encargado de la educación y de la guarda, cometidos en perjuicio de un menor conocido en la causa como "Gabriel".