Para participar de esta fiesta, no hay que hacer amigo del novio o la novia, sino comprar una entrada.

Porque, al parecer a un grupo de amigos se les ocurrió que una buena idea podía ser generar una fiesta temática basada en el simulacro de una boda. A tal punto que hay dos actores que hacen de los recién casados.

Y lo más curioso es que a muchas personas les pareció una buena idea.

Es por ello que ya se puede hablar del "éxito" de las "falsas bodas".

Y la expectativa de los participantes, desde luego, es ver si logran emular la historia de ese tío, que les contó que en un casorio se ligó a una de las primas de la novia. A la hora de una fiesta, todo vale, pero si es una idea ingeniosa, mejor.