Jorge Castro Rubel, sociólogo, hijo de Hugo Castro y Ana Rubel -detenidos y desaparecidos durante la última dictadura militar- brindó una riquísima entrevista con Página 12, a días de haber recuperado su identidad.

Su historia, al igual que la de cualquier nieto desaparecido, genera conmoción, emoción, diferentes sentimientos. En 2004, Jorge asistió al acto en la ESMA, que lideró el expresidente Néstor Kirchner, en el que se inauguró el Espacio para la Memoria.

Jorge estuvo en las inmediaciones y dentro, sin saberlo, de lo que había sido su lugar de nacimiento en junio o julio de 1977, cuando fue secuestrado en el vientre de su madre, que dio a luz en una piecita del Casino de Oficiales.

El nieto recuperado contó que fue duro para sus padres decirle que era adoptado y que le contaron la historia: "Me contaron lo que ellos sabían: que un día, cuando mi papá estaba de guardia en la Casa Cuna –es médico–, llegaron dos personas y dejaron un bebé en muy malas condiciones", relató.

Luego, continuó: "Eran dos hombres entre veinte y treinta años vestidos de civil. El me atiende –es pediatra endocrinólogo– y se da cuenta de que yo era muy chiquitito, muy prematuro. Ellos no tenían hijos, y ahí decide llevarme con él y con mamá".

Aunque aclaró: "Sabiendo que no era hijo biológico de ellos tenía la convicción de que me tenía que hacer los análisis con el Banco Nacional de Datos Genéticos", y también afirmó que en su momento pensó: "Si hay una familia que me está buscando, yo no puedo ser egoísta".

Jorge dijo en la entrevista que en terapia fue entendiendo que era muy importante conocer sus orígenes, y no sólo darle una oportunidad a esa familia que lo buscaba. "Es sentir que uno de algún modo lleva una felicidad enorme a un montón de gente, y todo lo que significa el proyecto de Abuelas y de restitución de las historias", concluyó.