Luego de varias jornadas sin cobrar boleto por el despido de un trabajador, la empresa Monsa, que opera la línea 60 de colectivos en todos sus ramales, realizó 47 despidos de choferes.

Por esa razón, el cuerpo de delegados de la línea decidió salir nuevamente a trabajar y no cobrar boletos, como lo llevan a cabo desde viernes, pero la empresa no les permite operar las unidades.

Mientras desde la empresa se afirma que se trata de un paro, los choferes aseguran que se trata un 'lock out', ya que sería la empresa la que no les permite tomar el trabajo.

En concreto, son cerca de 250 mil los usuarios afectados por esta situación que afecta a la línea de colectivos más utilizada en la Ciudad, con sus trece ramales.