El barrio de Hackney en Londres parece querer tapar la pobreza tirándola bajo la alfombra, o haciéndola más pobre.  Mendigar o dormir en la calle es considerado un crimen y habilita a cobrar multas a los homeless (sin techo).

Las multas varían entre 100 libras esterlinas (unos 137 euros) y se les agregan intereses si no las pagan.

Policías o funcionarios municipales pueden pedir a alguien que deje de "mendigar, beber alcohol, comportarse de modo asocial, usar inadecuadamente los baños públicos, dormir en la calle, orinar o defecar en un espacio público o tener un perro sin correa que causa molestias".

La petición titulada “Basta de criminalizar a los sin techo de Hackney" juntó 60.000 firmas en menos de una semana en change.org. "No habría que castigar a la gente por el 'delito' de no tener un techo encima de sus cabezas", escriben quienes impulsaron esta campaña.