La carta completa:

Queridos trabajadores de Aerolíneas

Queridos compañeros y compañeras de Aerolíneas

Me sumé al mundo de Aerolíneas hace un poco más de 6 años y fue mucho lo que aprendí en esta apasionante industria aerocomercial.

En el año 2008 el Estado recuperó la conducción estratégica de la Empresa, con los objetivos fundamentales de darle a los argentinos una conectividad federal y de proteger los puestos de trabajo. Y eso fue posible gracias a la férrea decisión política de Cristina Fernández de Kirchner.

Durante estos años vivimos momentos difíciles, pero salimos adelante gracias al gran equipo que conformamos con todos los trabajadores del grupo Aerolíneas. Mi más sentido agradecimiento a todos ustedes por el esfuerzo, la defensa de la compañía y por los logros que fuimos alcanzando. Logramos continuar adelante a pesar de los palos en la rueda y de los constantes ataques de los medios de comunicación.

En estos años de gestión pública, llevamos adelante un proceso de recuperación de la aerolínea de bandera que deja como resultado obras de infraestructura y mejoras verdaderamente tangibles. Renovamos la flota por completo, pasando de 26 a 77 aviones operativos (y ya comenzamos a desprogramar aviones incorporados por esta propia gestión para seguir modernizando la flota). Construimos el hangar 5 en Ezeiza, que es el más grande de la región, y en marzo estará operativo albergando a nuestros aviones para hacer más eficientes nuestros procesos de mantenimiento.

Tenemos una nueva mock up para entrenamiento en plena construcción, ahí no sólo los tripulantes sino también el resto de los sectores que tienen contacto con nuestros pasajeros podrán capacitarse para ofrecer el mejor servicio antes del vuelo y abordo.

Tenemos un nuevo edificio corporativo en Aeroparque que nos permite estar juntos facilitando el trabajo en equipo y, lo más importante, cerca de la operación, cerca de los pasajeros, que son el termómetro de nuestro trabajo. Este año van a ser casi 11 millones los pasajeros que nos elijan, más del doble que los pasajeros que transportábamos en 2008.

CEFEPRA es un orgullo para Aerolíneas y para todos los argentinos y deja marcado a fuego el sentido de la recuperación de la aerolínea de bandera, que a mediados de los 90 cerró su centro de simuladores y comenzó a capacitar a sus comandantes en el exterior.

Todas estas obras son fruto de una decisión política: cuidar las fuentes de trabajo, conectar a los argentinos y generar el crecimiento de los ingresos de la compañía mediante una fuerte inversión del Estado, que lamentablemente algunos medios se dedicaron a interpretar como “pérdidas”. Sin embargo, no hay que dejar de insistir con que ese dinero invertido en obras tangibles, en aviones, en modernizar a nuestra querida aerolínea de bandera jamás puede ser considerado una pérdida. Esos recursos no sólo son una inversión, sino que ya son una “ganancia”. Con esas inversiones gana el país. Ganan todos los argentinos. Porque ahora todos los argentinos tenemos una empresa de pie.

Siento un profundo amor por Aerolíneas Argentinas, una empresa que enamora, que nos apasiona a los aeronáuticos y que llevamos en el corazón (y muchos incluso literalmente tatuada en la piel).

En unos minutos estaré traspasando el mando a las nuevas autoridades, a las que les deseo mucho éxito, es fundamental que le vaya bien a la nueva gestión, para que le vaya bien a los argentinos.

Así que me despido con esta última comunicación y con un abrazo fuerte a cada uno de ustedes.

Con mucho cariño, Mariano Recalde