Desde que Jorge Rial se volcó a la política con su programa Cosa Nostra, los temas de debate son más profundos que los que habitualmente trataba en Intrusos sobre chismes de la farándula.

Lo que no se imaginaba es que sus propios panelistas se trenzaran en una discusión sobre los chistes desubicados que afectan a las mujeres o a la comunidad gay.