Un móvil de Crónica se dirigió a Río Negro para mostrar la vida de Miguel Fernández, alias “Tarzán”, un hombre que cuidaba las casas en la zona y que debió abandonar el lugar ya que los techos se caían abajo.

A falta de alojamiento, Miguel construyó una casa en la copa de un sauce y hace ya más de dos años que vive allí. La misma cuenta con electricidad para tener luz por la noche y poder escuchar música, una hornalla para calentar el agua del mate y cocinar algo, y como si eso fuera poco también posee un microondas. “MacGyver es un poroto al lado mío”, tiró.

Los dueños de la zona quieren desalojar a Miguel, aunque el reclama que le deben 1.500.000 pesos por sus servicios.