Como todos los años, se renueva la amenaza del aumento en una de las tarifas que más impactan a los porteños: y es que en el marco de los tarifazos oficiales, todos los sectores sienten que es el momento perfecto para seguir pegándole al bolsillo del trabajador.

Como bien analizó Luis Novaresio en Desayuno Americano, los aumentos de las expensas para los que viven en consorcios no son a razón del incremento en los sueldos de los encargados, sino que responden a la inoperancia (o falta de interés, vaya a saber por qué motivos) de las autoridades para controlar que las negociaciones paritarias sean sinceras.

El sueldo de un encargado "no impacta más de un 40 a un 45 por ciento en las expensas y este incremento no tendría que incidir mucho más del 7 por ciento", dijo el titular de la Federación Argentina de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (FATERyH) Víctor Santa María.

Sin embargo, Clarín prefiere quedarse con la versión de los consorcistas, que son los que le ponen el numerito a la cuenta de gastos comunes. El presidente de la Federación de Asociaciones de Consorcios (FEDECO) Samuel Knopoff aseguró, por el contrario, que el salario de un portero "representa, en promedio, entre el 70 y 80 por ciento de la recaudación mensual de expensas", dándole crédito al aumento que definen, también sin controles estatales.

Aumentos por paritaria

Según informa el sitio cypnoticias, el gremio que conduce Santa María logró la cancelación de tres bonos no acumulativos pero retroactivos de 1.800 pesos de marzo, 1.800 de abril y 2.000 de mayo, lo que equivale que en la próxima liquidación los consorcios deberán darle a cada encargado un total de 5.600 pesos.

El segundo tramo del aumento se aplicará a partir del sueldo de junio y que será de un 25 por ciento hasta noviembre, mes en el que se debería volver a discutir otro incremento salarial. A estos se le sumará un bono de fin de año que será del 20 por ciento del sueldo básico de convenio, a cobrar con la segunda cuota del aguinaldo.