Sergio Maldonado eligió compartir el pensamiento que Santiago había manifestado en un texto: entre sus líneas el joven ahora desaparecido utilizaba la ironía para referirse al sometimiento del poder contra las personas. Así de simple, así de natural era su postura ideológica. Santiago sabía de lo que hablaba.

Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, fue otra de las oradoras, al igual que el Premio Nobel de la Paz, Adofo Pérez Esquivel.

A diez días de la última vez en la que se vio al joven platense, organismos de derechos humanos y la ciudadanía en masa se encargaron de demostrar su disconformidad con la actuación de las autoridades en Seguridad, con pancartas que reclamaron la renuncia de la ministra Patricia Bullrich y de su mano derecha, Pablo Noceti.