"Bronca, llanto, angustia todo eso mezclado...", dice una parte de su sentido descargo. Carlu Cabalca es una de las docentes que enfrenta una situación desesperante. mientras desde el Gobierno nacional incumplen con su salario desde hace cuatro meses, la maestra de uno de sus tres hijos no adhiere a las medidas, por lo que insiste en que los alumnos tengan el material para estudiar.

Pero la cuesta sueldo de Carlu tiene un saldo de 0,34 centavos. Y es que ni siquiera el adelanto que abonó a cuenta la Provincia fue inmediatamente sustraído por el débito de la tarjeta de crédito, la única forma de palear el mantenimiento de su familia como jefa de hogar.

Carlu es rehén de la división provocada por las políticas salariales y la negación a las paritarias, por no poder percibir su salario y por tener que responder a las exigencias de otros colegas que no entienden a los educadores perjudicados.

En su descargo, Cabalca deja en claro que Nación si es responsable por salarios docentes, desmintiendo lo que el ministro Bullrich repite en sus declaraciones. Así están nuestros maestros, así los quieren enfrentar, así los quieren esclavizar.