Fue un milagro, diría un católico, mientras que un ateo supondría que el destino no lo quiso. Lo concreto es que los Kapanga pueden subir contenidos a sus redes sociales porque el impacto de un auto cuyo conductor tenía 1,67 de alcohol en sangre, -según el control de alcoholemia registrado en el video que subió la banda- no fue lo suficientemente certero como para hacer volcar al ómnibus que los transportaba.

La falta de conciencia sobre los peligros que acarrea manejar después de haber tomado alcohol es alarmante en un país donde mueren veinte personas por día por accidentes de tránsito, y los Kapanga abordaron el tema con la severidad y la importancia que lo merece.