El Hospital de Moreno detalló que una adolescente "ingresó el sábado pasado  al hospital con fiebre producto de una infección urinaria y contracciones, por eso se la internó y la mamá pidió la aplicación del Protocolo de aborto no punible".  Desde el Ministerio de Salud aclararon que no se aplicó el protocolo correspondiente ya que la vida de la niña de tan sólo 13 años podría correr riesgo en caso de realizarle un aborto.

La adolescente violada está transitando su sexto mes de embarazo, y dado que el feto tiene  23 semanas es imposible practicarle un aborto sin que corra riesgo la madre.

Personal de los Programas de Salud Reproductiva y Procreación Responsable y de Prevención de la Violencia del ministerio de Salud provincial se hicieron presentes en el hospital “para brindar asesoramiento, contención y acompañamiento a la víctima y a su familia”.


La Organización Mundial de la Salud define como aborto la interrupción voluntaria del embarazo hasta las 20-22 semanas y/o hasta que el producto del embarazo alcance los 500 gramos; y la Guía Técnica Nacional de aborto no punible se basa en esta definición.

Lidia Tundidor, coordinadora del Programa Provincial de Prevención y Atención de la Violencia Familiar y de Género de la cartera sanitaria provincial, comentó que “la denuncia de violación se radicó hace un mes. En ese momento hubiera estado en la situación adecuada para someterse al aborto no punible, pero pasó el tiempo y ahora no estamos ni siquiera frente a la posibilidad de hacerlo sin poner en riesgo la vida de la víctima”.

Los especialistas recomiendan llevar a término al embarazo y practicar una cesárea programada contemplando la posibilidad de adopción. Además se señaló que la víctima tiene derecho a no entrar en vínculo con bebé.