Conocido como "El Caníbal de Canterbury" -por ser oriundo de aquél pueblo perteneciente al condado de Kent, en el Reino Unido-, un enfermero estadounidense fue condenado a nueve años de prisión por planear decapitar y comer a un nena de 14 años. "No encuentro a los niños sexualmente atractivos, pero sí los encuentro interesantes como fuente de comida", dijo a la policía.


Dale Bolinger, de 58 años, había conocido a la adolescente, una mexicana llamada Eva, en un sitio llamado Red de Fetiches Oscuros -DFN, por sus siglas en inglés-. En sus conversaciones, describió qué actos sexuales quería realizarle y como la mataría con un hacha que había comprado, a lo que ella consintió.

Lejos de esconder sus crímenes, el hombre aseguró haber comido a una mujer de 39 años y a un nene de cinco a través de un chat con otros usuarios. Como si eso fuera poco, en su perfil, en el que se hacía llamar Chris C., describió sus intereses: "canibalismo, principalmente la caza y preparación de mujeres jóvenes pero a veces no tan jóvenes".


El FBI en Nueva York fue quien descubrió estas conversaciones hasta finalmente dar con la identidad de Bolinger, quien se hacía llamar "Meatmarketman" -"Hombre del mercado de carne"-.

FInalmente, tras un juicio de cuatro días, Bolinger fue declarado culpable de intentar conocer a una niña menor de 16 años y acoso sexual. La jueza Williams, quien lo condenó, dijo que su conducta es "aberrante, estremecedora, repulsiva y peligrosa".