Un relevamiento en 14 provincias realizado por el Instituto de Tecnología de Alimentos del INTA arrojó que el 83 por ciento de los argentinos cambiaron sus hábitos de consumo de alimentos durante la pandemia por el coronavirus.

Según el repaso que hicieron en C5N, estos cambios de hábito se debieron, en especial, a cuestiones económicas, por falta de comercios de cercanía, cierre de comercios, imposibilidad o temor a contagiarse.

Además, el 69 por ciento de las personas encuestadas admitió tener algún miedo a contagiarse durante las compras y el 90 por ciento adoptó medidas preventivas luego de realizar las compras, como limpiar los alimentos con alcohol o lavandina.

También se modificó la forma de comer durante la cuarentena: aumentó el consumo de cereales, harinas, infusiones, frutas y hortalizas, lácteos, bebidas y carne; y disminuyó la comida lista para consumir, como productos congelados, snacks, gaseosas, quesos y fiambres.