La Policía encontró este jueves el cuerpo de Sheila Ayala, la nena de 10 años que permanecía desaparecida desde el domingo, y cuando la investigación se centraba en el departamento de los tíos la víctima, ambos confesaron el crimen.

La vivienda, donde habitan una hermana del papá de Sheila junto a su esposo, se encuentra muy cerca de la doble pared en donde fue hallada la niña, y en su interior detectaron un colchón con moscas, bolsas de residuos y una muñeca ‘Hello Kitty’, de acuerdo con TN.

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Según publica Clarín, una hipótesis es que el asesino pudo haberla arrojado por un balcón para luego descender a planta baja y acondicionarla.

Antes de confirmarse el hallazgo de la nena, un tío y un amigo fueron retirados por la Policía del lugar, en lo que parecía una detención, aunque el comisario luego aseguró que por el momento no había personas demoradas.

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