Evidentemente los libertarios están muy bien entrenados porque no paran de correr en la calle, la cual decían que iban a recuperar contra los supuestos “orcos”. 

Este joven que se autodefinió como “libertario” provocó a la multitud presente que manifestó su bronca por la presencia de la vicepresidenta y defensora de genocidas, Victoria Villarruel, en el lugar. 

El muchacho comenzó a hacer gestos a la gente que no gustaron nada y por eso varios de los asistentes lo echaron a las patadas del lugar. 

Cuando una de las personas se acercó para preguntarle por qué empezó a provocar a la multitud, el muchacho respondió: “Porque soy libertario”. 

Parece que el solo hecho de auto definirse así abre la puerta a la provocación de la gente que se encuentra evidentemente enojada por la mala situación política y económica del país.