Ante la fiscal Viviana Fein que estaba investigando la muerte del fiscal Alberto Nisman, el juez Ariel Lijo declaró que se había comunicado en varias oportunidades con el fallecido fical Nisman antes y después de la presentación de su denuncia.

Lijo declaró también que Nisman no tenía más elementos que los que figuraron en la denuncia presentada.

Ahora, con la reapertura de la denuncia que intenta involucrar a la expresidenta Cristina Fernández en un supuesto complot con Iran sobre un memorandum que nunca llegó a existir y unas circulares rojas que nunca fueron levantadas. El juez Lijo fue quien recibió la denuncia en primera instancia pero al constatar que no tenía conexión con lo que él estaba investigando la pasó a sorteo.

Servini de Cubría no habilitó la feria y todo terminó cayendo en manos de Rafecas quien la desestimó por inexistencia de delito.

Ahora será el mismo Lijo quien se encargue de investigar si la denuncia de Alberto Nisman tenía algún sustento.