Según el informe difundido por el Banco Mundial se asegura: “Uruguay, Argentina y Chile ostentan las cifras más bajas de pobreza crónica, con tasas de alrededor del 10%”.

El documento destaca que “en el otro extremo, Nicaragua, Honduras y Guatemala muestran las tasas más altas de pobreza crónica, que fluctúan entre 37% en Nicaragua y 50% en Guatemala – índices - considerablemente mayores que el promedio regional de 21%”.

Por otro lado se remarca que  “al 2012, uno de cada cinco latinoamericanos ha sido crónicamente pobre desde el 2004, lo que significa más de 130 millones de personas”. Pero resalta que “la pobreza en ALC (América Latina y Caribe) disminuyó más de 16 puntos porcentuales en el transcurso de una sola década, de 41,6% en el 2003 a 25,3% en el 2012. Y la pobreza extrema se redujo a la mitad durante el mismo período, de 24,5 a 12,3%”.

Asimismo, el informe subraya “una faceta adicional de la dramática reducción de la pobreza es el surgimiento de una amplia clase media en ALC, la cual se incrementó en alrededor del 23% de la población en el 2003 a 34% en el 2012 y superando en  2010 por primera vez el número de personas pobres”. Lo que implica que “setenta millones de personas, una cifra extraordinaria, salieron de la pobreza; el resultado más impresionante en reducción de la pobreza en la región en décadas”.