El lugar se vendía en internet como una clínica modelo donde los pacientes estaban muy cómodos, pero a raíz de una denuncia anónima, aunque se supone que fue realizada por uno de los trabajadores, la policía se encontró con este panorama dantesco.

Los pacientes eran atados con cuerdas a unos grilletes que habían sido colocados en la pared para evitar que deambularan.

La carátula de la causa es por privación ilegítima de la libertad y hay al menos 14 personas detenidas mientras se evalúa su grado de responsabilidad.

Los pacientes fueron trasladados a otros lugares mientras las familias deciden sus destinos.