Natacha Jaitt debía presentarse este viernes ante la fiscal María Soledad Garibaldi, a cargo de la investigación por los presuntos casos de abusos sexuales de jugadores juveniles que viven en la pensión de Independiente, para declarar como testigo. Pero la audiencia se suspendió porque la mediática pidió una prórroga y solicitó garantías porque sostiene que ella y sus hijos fueron amenazados.

Garibaldi había citado el jueves como testigos a Jaitt y al exfutbolista de Independiente Daniel Bertoni por declaraciones que realizaron sobre conocimientos de los abusos sexuales. 

El pedido de prórroga fue presentado por el hermano de la mediática, Ulise Jaitt, en el Polo Judicial de Avellaneda.

Jaitt había estado en Tribunales el miércoles, que se presentó ante el fiscal federal Federico Delgado para declarar como testigo tras una denuncia del periodista Carlos Pagni, pero la audiencia terminó en escándalo cuando la locutora se retiró a los gritos de la audiencia alegando que le hicieron "una cama".