A los 10 años, “Facha”, como eligió llamarse, llevará nombre de varón porque él lo decidió, y así se autopercibió desde niño, amparado en el derecho que le otorga la ley de Identidad de Género.

De esa manera, acompañado por sus padres y su abogada, Facha se presentó este martes en el Registro Civil de la Ciudad de Buenos Aires, para convertirse en el primer menor de 18 años en cambiarse de género sin ningún tipo de controversia, distinto al caso predecesor, el de Lulú.

“'La cigüeña se equivocó, soy un nene', me dijo un día al volver de las vacaciones”, reveló Bárbara, la madre del joven, en diálogo con la agencia Télam, y consideró: “Fue la vez que lo puso en palabras; lo acompañamos en este paso porque sabemos cómo sufría".

La familia fue recibida por la directora del Registro Civil de la calle Uruguay al 700, Ana Labaqué, quien definió al acto administrativo como "la adecuación de la normativa que viene acompañando este proceso de reconocimiento de la identidad tal como cada uno la percibe".

"Un niño necesita el acompañamiento de la sociedad para vivir en paz, con su identidad, tal como él decide que sea", expresó la directora, al tiempo que destacó que este caso “fue un acto de justicia”.

Por su parte, Bárbara agradeció a los organismos y organizaciones que apoyaron a la familia, y reveló: "Se pusieron a nuestro lado cuando decidí acompañar a mi hijo, y a la escuela de mi hijo, cuyas autoridades también están con nosotros".

La familia acudió primero al INADI y después a “Fulanas”; de allí entró en contacto con Kalym Sosa, titular de la Red Intersexual, Transgénero y Transexual de Argentina (RITTA) y el primer varón trans en recibir el DNI de manos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Al mismo tiempo, María Rachid, diputada porteña y fundadora de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT), celebró que la ley de Identidad de Género "haya incluido a niñas, niños y adolescentes menores a 18 como sujetos de este derecho".

La diputada explicó que un estudio de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad arrojó que hacia los "10 años las personas trans se autoperciben, y a esa edad es cuando comienzan los problemas con la familia, con la escuela y muchos terminan en la calle sin otro destino que la prostitución".

Por último, el titular de la CHA, César Cigliutti, indicó que "los casos que vinieron después de Lulú tienen el camino allanado”, y agregó: “El cambio de identidad de género registral de la niña necesitó de mucho trabajo de las organizaciones y respaldo político para no tener que terminar en la Justicia".