Cuando las fotos de Tatiana comenzaron a tener repercusión en Twitter, fue descubierta por sus empleadores quienes decidieron echarla luego de que ella confesara su particular práctica.

En una de las imágenes difundidas, se puede ver a la enfermera haciendo el signo de la victoria frente a un paciente que acababa de sufrir un ataque cardíaco.

"Está claro que mientras estaba haciéndose las fotografías no estaba cuidando a sus pacientes. Además, muestra un cruel desprecio por el bienestar de los afectados, algunos de los cuales murieron después de tomarse esa foto", comentó Artem Golubev, un integrante del área local de salud, según diario ABC de España.

Por su parte, Kulikova prefirió mantener silencio y no atender a los medios locales tras conocerse la noticia.