Los trabajadores de la agencia oficial de noticias emitieron un comunicado explicando cuáles fueron las razones por las cuales emitieron una nota fallida donde hablaban de siete muertos en el recital cuando sólo había dos confirmados. 

Los empleados de la agencia responsabilizan a los directivos por el ajuste de personal y califican el incidente como una "un acto de monumental irresponsabilidad periodística".

Comunicado: 

Periodismo de ajuste

A propósito de la cobertura del recital del Indio Solari

Télam difundió esta madrugada un despacho que “informaba” que al menos siete personas habían fallecido durante el recital del Indio Solari. El respaldo de esa información por la agencia oficial al rumor que entonces circulaba fue el factor determinante para que numerosos medios legitimaran y replicaran ese dato, luego desmentido por la realidad.

Un desatino de proporciones. Un acto de monumental irresponsabilidad periodística. Ningún medio está exento del error. Pero aquí, más que error, quedó al desnudo una forma de conducir la redacción por parte de la empresa que no envió un periodista a Olavarría para evitar pagarle horas extras u otorgarle un compensatorio –se levantó el viaje, que estaba programado desde hace semanas por la sección Espectáculos, el jueves previo- y que no tiene una estructura adecuada en el turno madrugada. No se puede hacer periodismo sin periodistas. Sin periodistas nuestra información tiene el mismo valor que cualquier tweet. Así fue anoche. La agencia, que debió ser el canal de la certeza y la responsabilidad, alimentó el desconcierto.

El jueves por la mañana el Gerente Periodístico, Daniel Capalbo, informó que la empresa levantaba la totalidad de las coberturas periodísticas fuera de Capital Federal y por tiempo indeterminado a raíz de la que Comisión Interna no aceptaba que los periodistas no cobraran ni compensaran las horas trabajada en los viajes. La primera cobertura que fue descartada fue la del Indio Solari (anoche no hubo cobertura del recital en sí, sólo de los fallecidos, y a la distancia). La empresa entendió que no valía la pena otorgarle un compensatorio al enviado por trabajar toda la madrugada ni pagar los diez mil pesos que costaba el traslado. El precio de ese recorte fue la degradación del servicio.

La falta de rutinas periodísticas adecuadas dejó en evidencia la debilidad de la estructura del turno madrugada, desértico, a pesar de los cerca de 500 periodistas con los que cuenta la redacción. Porque la empresa desalienta que se trabaje en ese horario, por ejemplo, negándose a pagar el adicional de ley por la hora nocturna o quitando los días de vacaciones extras que, al personal de esa franja, le asegura el convenio colectivo.  

Télam tiene extraordinarios recursos humanos en las secciones Espectáculos y Sociedad para realizar una cobertura de excelencia del recital del Indio Solari o de cualquier otro mega evento. De hecho, anoche mismo, muchos de esos profesionales lo demostraron. Pero esos recursos no se aprovechan si la empresa no provee las condiciones estructurales para trabajar con los estándares que se corresponden a un medio público.

El Directorio eligió ajustar por el periodismo. No existe el periodismo de excelencia sin estar presente en el lugar de la noticia. Cada peso que se recorta en el servicio es credibilidad que la agencia pierde.

Quizá a la conducción de la empresa no le importe, pero a sus trabajadores sí.

Comisión Gremial Interna