La Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (AMMAR) y el Frente Unidad Emancipatorio por el Reconocimiento de los Derechos de los y las Trabajadores/Trabajadoras  Sexuales de Argentina (FUERTSA) lanzaron una campaña por la derogación de los códigos contravencionales.

Las dos organizaciones impulsan esta acción contra las normativas que criminalizan mediante multas o arresto de hasta 30 días oferta de servicios sexuales en la calle en 18 de las 24 provincias de la República Argentina.

"El trabajo no puede ser una contravención y las disposiciones que rigen contra el trabajo sexual en la calle datan de la última dictadura esas militar, las que criminalizan el trabajo en la vía pública por parte de las trabajadoras sexuales como ocurre también con los manteros y vendedores ambulantes", sostienen a través de un comunicado.

Estas disposiciones ponen a los agentes policiales en el rol de juez y parte, al extremo de considerar su punto de vista como suficiente para determinar si alguien cometió "una falta contra la moral y las buenas costumbres" o "contra la decencia y moralidad públicas".

La secretaria general de AMMAR Nacional e integrante de FUERTSA, Georgina Orellano, afirmó: "Los códigos contravencionales son normativas que restringen el uso del espacio público y básicamente le otorgan poder de arbitrariedad a la policía para que hostigue, persiga, violente y detenga a las y los trabajadores de la economía popular, entre ellos, las trabajadoras sexuales que hacen uso del espacio público para ofertar sus servicios".